Venezolanos preparan sus alimentos en el sector de Colchane. APG
Este fin de semana, se sumaron otros dos fallecimientos con lo que suman al menos 15 en el sector de Colchane, donde su autoridad pide atención con seriedad y responsabilidad al Estado.
Una bebé de nueve meses falleció ayer en la tarde mientras sus padres, de nacionalidad venezolana, intentaban cruzar por la inhóspita frontera entre Chile y Bolivia.
La pequeña nació en Perú y se suma a otras dos víctimas fatales de la crisis migratoria inédita de este fin de semana y a las 15 de los últimos meses.
La pequeña, que iba en brazos de su madre cayó al suelo y se dio un fuerte golpe en la cabeza, según medios locales.
«Constatamos inmediatamente que no tenía signos vitales y procedimos a las maniobras de reanimación las cuales fueron infructuosas. No se pudo lograr canalizar una vía debido a que la menor presentaba una deshidratación severa», dijo Guillermo Tapia, médico del centro médico de la localidad de Colchane.
El pasado sábado otros dos migrantes también murieron en esta zona andina a más de 3.600 metros de altura sobre el nivel del mar con temperaturas extrema y que se convirtió en los últimos meses en ruta habitual para que extranjeros lleguen a Chile de manera irregular.
«Siento una enorme pena por esta muerte que, sin duda, remece a todos. Sin embargo, es de suma urgencia atender este fenómeno migratorio con seriedad y responsabilidad de Estado, ya que, en estos últimos tres días nuestra comuna registra tres migrantes fallecidos», sostuvo Javier García, alcalde de Colchane.
Ni la pandemia ni la crisis social que se extendió durante más de un año en 2019 han alejado el deseo de migrar a Chile, uno de los países más atractivos dentro de América Latina por su estabilidad política y económica.
Tras un pico de entradas el pasado febrero, la crisis se agudizó en los últimos días con cientos de extranjeros vagando por distintas localidades y el Gobierno anunció la construcción de varios albergues para atender la crisis.
Con el objetivo de frenar la entrada ilegal, el presidente chileno, el conservador Sebastián Piñera, promulgó en abril una nueva ley de migración más estricta que obliga a los extranjeros a obtener visados en sus países de origen y permite las deportaciones.
En Chile hay 1.4 millones de migrantes, lo que equivale a más del 7 % de la población, y los venezolanos son los más numerosos, seguidos de peruanos, haitianos y colombianos.