Los papás de colegios privados a nivel nacional indicaron que no acudirán a los puntos de inmunización por «falta de información» sobre las dosis Sinopharm para menores de 5 a 11 años. Temen posibles secuelas.

Una niña recibe la vacuna contra la COVID-19 en la Escuela Técnica de Salud.
Después del anuncio del presidente Luis Arce Catacora sobre la ampliación de las vacunas a niñas y niños de 5 a 11 años, los padres de familia de colegios privados a nivel nacional indicaron que no acudirán a los puntos de inmunización por «falta de información» sobre la aplicación de la vacuna a este grupo etario de la población.
“Los padres de familia de los colegios privados en los grupos que tenemos manifestaron que no hay coordinación de información de un informe técnico científico internacional que avale el uso de la vacuna Shinophram para la inmunización de los niños”, explicó el presidente de la Asociación de Padres de Familia de Colegios Privados de Cochabamba y Bolivia, Ernesto Suárez Arévalo.
Suárez afirmó que no accedieron a datos fidedignos de parte de la autoridad en salud ni se informó o coordinó previamente, por lo que están a la espera de que puedan explicar a los papás por qué se usa la vacuna china y no la Pfizer. Temen por «posibles secuelas» que puedan dejar las dosis.
Entre tanto, algunos padres acudieron ya a la Escuela Técnica de Salud, por ejemplo, para vacunar a sus hijos de entre los 5 a 11 años.
En el resto del país también se observa la concurrencia de los papás junto con sus hijos, con el propósito de que estos últimos sean inmunizados.