«Quieran o no quieran decirlo, esta es una obligatoriedad para la vacuna y al diablo la Ley de Emergencia Sanitaria que ellos mismos han hecho», sostuvo el titular del Colegio Médico de Bolivia.
El presidente del Colegio Médico de Bolivia, Luis Larrea, criticó la decisión del Gobierno de exigir el carnet de vacunación contra el COVID-19 en espacios de concentración de personas, a partir del próximo 1 de enero de 2022.
Para Larrea, el decreto va en contra de la Ley de Emergencia Sanitaria y es una “medida desesperada” ante el “fracaso” de la campaña de inmunización del Ministerio de Salud.
“Este decreto es de la improvisación, porque quieran o no quieran decirlo, esta es una obligatoriedad para la vacuna y al diablo la Ley de Emergencia Sanitaria que ellos mismos la han hecho. Esta ley manifiesta que la vacunación no es obligatoria, que todo es con consentimiento informado (…) y hoy día con un Decreto Supremo borran su misma ley”, sostuvo.
“Con esto nos damos cuenta de que son medidas totalmente desesperadas, en el ánimo de ver cómo puede deshacerse de 20 millones de vacunas cuando su estrategia de vacunación no ha funcionado”, añadió.
En esa línea, dijo que con este decreto se afecta más a la gente humilde y del área rural.
“Esto es por la negligencia de las campañas de vacunación que han hecho el Gobierno y el Ministerio de Salud. Se ha jugado con los datos, se ha jugado con la vacuna, porque en junio y julio el Gobierno decía que la segunda dosis debía ponerse en 120 días, y nunca han mostrado una certificación médica que diga aquello. Eso fue porque le han fallado a la población y ahora la gente desconfía. Hoy día sacan un decreto que dice que es obligatorio”, recalcó.
Para los galenos, la mayor preocupación es la cuarta ola y la saturación en los hospitales, dijo el presidente del Colegio Médico de Bolivia.
“En los hospitales estamos como cuando inició la pandemia, o peor, tal vez, porque no tenemos contratos. No hay recursos humanos, y eso nos preocupa. Creemos que la seguridad social está siendo afectada y el sistema público, peor”, subrayó.