La mascarilla ‘Kosk’ se puede usar mientras se come o se bebe, pero ¿será efectiva para evitar el contagio de COVID-19?
¿Funciona el Kosk?
Una mascarilla que permite que la boca quede expuesta vulnera el nivel de protección de las mismas, pone a sus usuarios en riesgo de inhalar gotitas cargadas de coronavirus y permite que los propios aerosoles potencialmente infecciosos del usuario llenen el aire.
Aún no se ha realizado un estudio sobre cuánta protección ofrece un Kosk cuando está doblada. No obstante, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) no han dado su visto bueno.
Los CDC continúan recomendando usar una mascarilla que cubra la nariz y la boca. La organización indicó que las máscaras quirúrgicas desechables y KN95, que se ajustan bien, ofrecen más protección que las máscaras de tela.