Ya desde 2014, las planillas de salarios del Estado boliviano crecieron de forma desproporcionada
Movimiento de billetes en moneda boliviana. | ABI
Después de que el presidente Luis Arce anunciara la reducción del 30 por ciento de las planillas del Tesoro General de la Nación (TGN) para destinar esos recursos a la creación de ítems en educación y salud, economistas coinciden en que el Estado no tiene liquidez suficiente y acude a medidas paliativas que no tendrán gran impacto ni resolverán los problemas económicos.
“Ésta es una señal de que ya no se cuenta con los recursos públicos suficientes para poder cubrir la planilla de sueldos del TGN. (La decisión) puede significar suprimir muchos puestos de trabajo o mantenerlos, pero reduciendo salarios o una combinación de ambas”, dijo el economista Germán Molina.
Además, considera que el Gobierno no tiene otra alternativa: “La finalidad es clara, ya los gastos son elevados y los ingresos, aunque estén aumentando, no son suficientes; entonces entramos en la etapa de reducir lo que es TGN, el pago de planillas (…). Pero aún no es suficiente. Es una medida muy superficial en función a lo que va sucediendo con los recursos públicos”, detalló Molina.
El economista José Gabriel Espinoza considera que el Gobierno debe aplicar un plan de reactivación, puesto que los indicadores colocan a la dinámica económica del país por debajo de 2019. Explicó que, si bien hay recuperación con respecto a 2020, no es adecuado comparar con un año de pandemia con cuarentena rígida.
Ya desde 2014, las planillas de salarios del Estado crecieron de forma desproporcionada. Según Espinoza, el Gobierno tiene que hacer ajustes que no son de la afinidad de Arce Catacora desde que era ministro de Economía.
“La reducción es bastante fuerte, se trata de 150 mil de 550 mil trabajadores, que pueden sentir el impacto de esta reducción de planillas”, explicó el analista.
En tanto, el economista Alberto Bonadona considera que la medida no significa una reducción del presupuesto, sino un cambio de rubro por ítems en salud y educación.
“Más se refiere a una modificación de los rubros, de lo que se gasta en un típico empleado público a los gastos en maestros, médicos y personal de salud”, dijo.
Por otro lado, Molina indicó que con esta reducción sólo se da cumplimiento a la Ley de PGE 2021, que establece que se reduciría en un 30 por ciento de la planilla de gasto corriente.
El diputado Miguel Roca (CC) indicó que la ley sólo baja en 5 por ciento la planilla de salarios del PGE. “El resto puede ser gastos de alquiler, viáticos, compras y otros. Me parece más adecuado que seguir cargando impuestos a la población”, señaló.
Gasto corriente es de Bs 130 mil MM
El Presupuesto General del Estado (PGE) 2021 prevé un gasto corriente 129.807 millones de bolivianos. El Gobierno anunció que se prioriza la inversión pública, para la dinamización de la economía, fortalecimiento de la demanda interna y se optimiza el gasto público.
El Presidente indicó la semana pasada que al inicio de su gestión encontró un déficit fiscal del 12,2 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), algo que, aseguró, no sucedió desde el Gobierno de la UDP (Unidad Democrática y Popular), en la década de los 80.
El PGE 2021, ajustado, presentado por el Gobierno señala reducción de gastos en personal y servicios.
Fuente: Los Tiempos