Un ampliado de las organizaciones sociales de la localidad de Los Negros resolvió este martes expulsar de esa comunidad a la familia de Alberth Rafael Quisberth Bernal (19), sospechoso del feminicidio de Erika Condori Vedia (17) ocurrido el pasado 23 de abril.

Fuente: eldia
Entre otras determinaciones resolvieron que el Ministerio Público agilice una condena de 30 años de cárcel, el cambio de los policías, asegurando que no están al servicio del pueblo y otorgar garantías para la familia que ha recibido amenazas, como así también la destitución del fiscal.
El pronunciamiento surge después que Erika fue encontrada degollada por su supuesto enamorado en un camino vecinal del barrio Belén. En principio, Quisberth que guarda detención preventiva por seis meses en el penal de Palmasola, confesó que Erika se cortó el cuello con un estilete en el afán de quitarse la vida porque atravesaba problemas familiares.
«Yo no lo mate, ella se corto el cuello y empezó a sangrar y para no verla sufrir acabe con su vida», dijo en una declaración que circuló en redes sociales. Sin embargo, ante el fiscal del caso, el sospechoso se abstuvo a declarar.


La autopsia médico legal develó que la joven víctima tenía tres cortes profundos en el cuello, fractura en el tabique nasal con hematomas y golpes en el estómago. La muchacha se encontraba con seis meses de gestación y al momento de perder la vida, el corazón de su bebé dejo de latir.

El Fiscal de Distrito Roger Mariaca Montenegro informó que se esta analizando abrir una causa penal paralela por el delito de infanticidio contra el joven universitario toda vez que se oponía al nacimiento de ese bebé y pretendía que su presunta novia interrumpa su embarazo.