Gonzalo Melgar, de 53 años, expresó su alegría y emoción luego de que el Gobierno promulgara, el miércoles 8 de septiembre, la Ley 1392 de Devolución Total o Parcial de Aportes a las administradoras de fondos de pensiones (AFP).
Para que esa ley sea analizada y aprobada por el Gobierno, instaló una huelga en las puertas de las AFP de la ciudad de Santa Cruz, pero luego decidió emprender una caminata hacia la sede de gobierno para conversar personalmente con las autoridades sobre esa normativa.
Llegó desde Santa Cruz hasta La Paz no en bus, avión, ni en algún otro medio de transporte, sino a pie. Luego de caminar 65 días, cumplió 45 jornadas de vigilia, instalado en la esquina de las calles Potosí y Ayacucho, frente de la Casa Grande del Pueblo.
Melgar nació en la localidad de San Carlos, provincia Ichilo del departamento de Santa Cruz. Es contador de profesión, pero quedó desempleado hace dos años y medio. Es casado, tiene siete hijos, de 27, 26, 23, 21, 17 (gemelas) y nueve años, quienes son su tesoro y su razón para salir adelante.
Antes de volver a Santa Cruz, conversó con ABI y relató su decisión de luchar por la aprobación de esa ley, sus experiencias en su viaje caminando y sus proyectos que se convertirán en una realidad con la aplicación de dicha normativa.
– ¿Cómo reaccionó su familia ante su decisión de llegar a La Paz caminando?
De Santa Cruz, partí el 10 de mayo, en un día más se cumplen cuatro meses fuera de casa. Aquí, en La Paz, el 13 de septiembre cumplo dos meses. En esta esquina (entre Ayacucho y Potosí) he dormido durante 45 noches, así que ha sido una lucha bien dura y sacrificada, pero que dio su fruto.
Al avisarles mi decisión de venir caminando, mi esposa y mis hijos no quisieron que venga, me dijeron que estaba loco. Mi señora (su esposa), especialmente, tenía mucha pena de que me pase algo en el camino.
– ¿Qué anécdotas tuvo en el camino?
En el trayecto me quebré un hueso de mi pie (izquierdo). Al llegar a La Paz, me tomaron una radiografía y salió que el quinto metatarso lo tenía roto. Con el pasar de los días, el médico me hizo otra valoración y me dijo que el hueso se había curado solito, pero me pidió reposo.
El dolor pasó, siento un poco de molestias algunas veces, pero puedo caminar tranquilo, más bien.
– Se aprobó la Ley 1392 de Devolución Total o Parcial de Aportes a las AFP ¿Qué significa esa norma para usted?
Para mí la ley significa el logro de un objetivo, el fin de una lucha y la satisfacción de que las metas se cumplen cuando uno es constante. Me da una satisfacción enorme, me siento emocionado porque me estoy yendo a descansar a mi casa, porque me acaban de entregar la ley en mis manos y porque los bolivianos se van a poder beneficiar con esta ley.
También me voy emocionado y agradecido con todos los paceños, porque siempre me han dado muestras de solidaridad, buenas palabras, apoyo, una palmadita en el hombro, así que me voy contento, feliz y me llevo la mejor impresión de La Paz.
¿Cuántos años aportó a las AFP?
He trabajado 23 años en diferentes empresas, en el Banco Ganadero, cinco años; en la Compañía Industrial de Tabaco, cinco años; en Fidalga, un año, en Banco Fassil, un año; en Frigor, cinco años; y en otros lugares.
Me retiré del trabajo el año 2018, luego intenté volver a trabajar, mandé mi currículo y no me respondían. Después decidí no volver a ser empleado, no volver a acatar órdenes, sino hacer mi propio negocio, (por eso ahora) las órdenes las voy a dar yo (sonríe).
¿Qué hará con el dinero que la AFP le devolverá?
A mí me encanta la gastronomía, dos veces hice el intento de poner una churrasquería, la primera me fue mal, la segunda me estaba yendo bien, pero me accidenté y lo tuve que dejar. Dicen que la tercera es la vencida.
Entonces, estos 2.000 dólares (alrededor de Bs 15.000) que me van a devolver, quiero invertirlos en una fiambrería, una fábrica de embutidos, voy a hacer chorizos parrilleros y salchichas ahumadas (…) que los voy a promocionar, serán muy ricos, se los garantizo.
Son 15.000 bolivianos, y en dólares son 2.100 más o menos. Es un pequeño ‘capitalito’ que, si uno lo sabe aprovechar, da. Mi hijo ha estudiado Gastronomía y Hotelería, así que me va a ayudar con eso; mi hija también sabe hacer unos postres exquisitos, vamos a poner un pequeño negocio familiar.
¿Qué les dice a las autoridades que aprobaron la Ley 1392?
Siempre hay que ser agradecido por lo que uno recibe. Al Gobierno agradecerle porque me escuchó, no fui el hombre invisible, me vio, tardó, pero me escuchó, me atendió y promulgó esa ley.
La pandemia del COVID-19 dejó una secuela grande de muertes, de desempleo, de necesidades; entonces, la gente ha buscado las mejores alternativas para salir de esa crisis, una de esas alternativas eran los aportes a las AFP, que es un ahorro nuestro, es la plata que hemos aportado y estamos en el derecho de disponerla.
¿Cuál es su mensaje para los que decidan retirar sus aportes?
A los que van a retirar el 15 por ciento (…) que lo sepan invertir; si tienen una necesidad urgente, que lo gasten ahí, pero que no que se lo gasten en ‘burreras’. A los que van a recibir como yo, 15.000 bolivianos, que lo inviertan, hay diferentes formas de salir adelante; sobre todo, en Santa Cruz, el que se muere de hambre es el flojo. Así que sepan cuidar su platita.
Maribel Condori Monrroy / Agencia Boliviana de Información