El jefe de bancada del Movimiento Al Socialismo (MAS), Gualberto Arispe, exigió este martes celeridad en el proceso judicial contra cuatro integrantes de la Resistencia Juvenil Cochala (RJC), acusados presuntamente de atentar contra la seguridad interna del país, destruir bienes del Estado y una serie de vejámenes en el gobierno transitorio de Jeanine Áñez.
La organización Creemos de Luis Fernando Camacho calificó la medida como un acto persecución política y llamó a defender a los miembros de la RJC.
«La acusación que se ha hecho la aplaudimos y pedimos más bien celeridad para que este caso llegue a su conclusión. Quienes han cometido delitos, quienes han cometido errores, han violado nuestras normativas, tienen que ser sancionados», declaró Arispe.
En un comunicado reciente, el Ministerio de Gobierno informó que Yassir Molina Lozada, Milena Sotto López, Mario Antonio Bascopé Revuelta y Fabio Alejandro Bascopé Revuelta fueron notificados con las acusaciones para que el 6 de junio presenten sus pruebas de descargo en el inicio de un juicio oral público.
Segun Arispe la población cochabambina se vio asediada por estas personas que, «de manera irregular se armaron» y provocaron zozobra.
Sin embargo, grupos afines al MAS también protestaron y agredieron, por ejemplo, a los trabajadores de la prensa en un mitin del transporte libre.
«De acuerdo a la responsabilidad que tienen, deben ser sancionados. Si el castigo es la cárcel, tiene que ser (…), para que en otra no vuelva a ocurrir. Se tiene que sancionar a los autores intelectuales y los materiales», declaró Arispe.