Morales denunció el lunes, munido de audios, que un coronel habría ordenado sacar a personal policial de un operativo donde se encontró fábricas de droga en Valle Sajta.
El líder del MAS, Evo Morales en conferencia de prensa.
Luego de la fuerte polémica que se desató tras la denuncia por presunto encubrimiento al narcotráfico por parte de policías, el expresidente Evo Morales sospecha que habría un «plan de espionaje» para «sembrarle» pruebas.
“Hemos recibido denuncias de personal policial subalterno que advierten de un plan de espionaje y seguimiento para sembrar pruebas en nuestra contra. No tenemos ningún miedo. Pedimos que las investigaciones avancen sin temor a los agentes del golpismo entrenados por Estados Unidos”, publicó en redes sociales.
Morales denunció el lunes, munido de audios, que un coronel habría ordenado sacar a personal policial de un operativo donde se encontró fábricas de droga en Valle Sajta.
El jefe antidroga José María Velasco, de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Narcotráfico (FELCN) señaló que las grabaciones podrían ser un «montaje» para desprestigiar a la entidad. Sin embargo, se realizó un operativo donde se encontró las instalaciones del narcotráfico. Hallaron cuatro laboratorios.
El expresidente consideró que en menos de 24 horas se comprobó la veracidad de su denuncia y apuntó la responsabilidad por las fábricas a extranjeros.
“Los hermanos del Trópico se preguntan dónde están los extranjeros que supuestamente usaban las fábricas de droga descubiertas”, señaló Morales.
El martes Morales acusó al coronel José María Velasco de ser uno de los «principales actores» en el encubrimiento al narcotráfico.