A cinco días del voraz incendio que devastó 40 hectáreas de la zona de anidación de la laguna Alalay, el Centro de Fauna Silvestre de la Alcaldía rescató a siete pichones de garza más que se suman a los ocho y al cuervo de río que fueron salvados.
Los pichones sobrevivieron en medio de los totorales que se quemaron, pero uno de ellos tiene un ala fracturada, por lo cual el personal del Centro de Fauna de la Alcaldía determinó entablillarla para su recuperación.
“El fin de semana hemos rescatado siete aves más, ahora, tenemos 15 en el refugio. Ahora corresponde esperar su recuperación porque son pichones, los veterinarios los van a tratar y alimentar”, dijo el director de Medio Ambiente, Elvis Gutiérrez.
Los animales están en una jaula acondicionada para su permanencia en el centro y su recuperación. Los alimentan cuatro veces al día con ispis y pechuga de pollo. Asimismo, los encargados del refugio humedecieron el césped para asemejarlo a una zona empantanada como el de los totorales.
Las aves se quedarán de tres a cuatro meses en el refugio antes de ser liberados o hasta que las plumas quemadas, en el caso de cuervo de río, se regeneren.