Una niña recibe agua de un grifo en la ciudad de Cochabamba.
En cinco, menos del 20% de los habitantes se beneficia con el servicio básico. La calidad del líquido que se distribuye varía dependiendo de las zonas.
En el departamento de Cochabamba, Sacaba es el municipio con mayor cobertura de agua potable, 85% de su población. Al otro extremo en cifras está Pojo con el 10.8%%, de acuerdo con los registros de Water For People Bolivia.
Hoy, 29 de octubre, se recuerda el Día Nacional del Agua. Para el director de Water For People, Andrés Abasto, en el mediano plazo, se tienen que establecer estrategias de gestión integral de recursos hídricos, “para evitar que de aquí a unos 10 años estemos atravesando problemas de desabastecimiento crítico de agua”.
Solo en seis municipios de 47 en Cochabamba, más de la mitad de su población tiene acceso a agua potable; en cinco, menos del 20%.
Sacaba está con el 85.4%, Cochabamba con el 73.6%, Cliza con el 55.7%, Chimoré tiene 54.2%, Arani contenpla el 52.6% y Punata registra 52.4%.
Hay 41 municipios que tienen menos de la mitad de su población con acceso al agua. En este grupo están incluidos cinco del Eje Metropolitano: Colcapirhua, que tiene cobertura del 49.4%; Sipe Sipe, 46.4%; Quillacollo, 45%; Tiquipaya, 37%; y Vinto, 37.5%.
Entre los municipios con menor acceso se identifican cinco con menos del 20% de sus habitantes: Tapacarí con el 17.7%, Arque con el 17.5%, Totora con el 13.7%, Cocapata con 11% y Pojo con el 10.8%., que son municipios de las regiones Andina y Cono Sur del departamento.
Los demás municipios tienen entre 21% y 50% de cobertura. Se trata de Toco 49.4%, Villa Rivero (46.6%), Omereque (46.5%), Shinahota (45.6%), Tiraque (44.9%), Tolata (44.7%), Colomi (44.4%), Santiváñez (44.3%), Tarata (43.7%), Capinota (42.3%), San Benito (42.1%), Pasorapa (40.7%), Tacopaya (40.6%), Sicaya (37.4%), Arbieto (37.1%), Puerto Villarroel (36.9%), Aiquile (36.4%), Tacachi (34.9%), Cuchumuela (34.5%), Vacas (33.7%), Entre Ríos (32.7%), Villa Tunari (31.7%), Sacabamba (30.8%), Pocona (29.7%), Anzaldo (27.6%), Bolívar (26.1%), Independencia (22.5%), Morochata (22%), Alalay (22%), Vila Vila (21.4%) y Mizque (20.5%), que incluye al pueblo de Raqaypampa.
Abasto expresó que el recurso hídrico debe tener un manejo adecuado, en Cochabamba requiere mayor atención. Además, dijo que “el agua es vida, pero más en una coyuntura como la actual debido a la COVID-19”, por los hábitos de higiene desde el lavado de las manos.
La calidad del agua que se distribuye en los municipios cochabambinos “fluctúa”. Abasto recordó que muchas enfermedades gastrointestinales son causa por lo general del agua contaminada. Instituciones como Water For People dispone de laboratorios portátiles que son utilizados pos las direcciones municipales de saneamiento básico para que, periódicamente, se puedan hacer controles en la calidad de agua.
Entre las zonas más vulnerables en lo referido al agua está la del Valle Alto. La institución trabaja en la actualidad con el municipio de Pocona, donde hay problemas de salinidad de suelos y de estrés hídrico.
En semanas anteriores, las autoridades departamentales, instituciones que trabajan con proyectos de agua y autoridades locales de esta región se reunieron para plantear y conocer proyectos que puedan resolver los problemas. Existen al menos seis propuestas grandes.
También existen necesidades en barrios periféricos de la ciudad de Cochabamba.