Investigadores Entrenan a las Vacas a ir al Baño para reducir la Contaminación ambiental

Investigadores entrenan a las vacas a ir al baño con una letrina especial, esto para eliminar desechos sin que lleguen a posibles aguas subterráneas y liberen gases dañinos al entorno.

La orina del ganado contiene gases nocivos que son amenaza potencial para la salud pública al liberarse al ambiente, además de contribuir al calentamiento global.

Para hacer frente a este problema, la investigadora Lindsay Matthews de la Universidad de Auckland en Nueva Zelanda y sus colegas han pensado que si se entrenan a las vacas a ir al baño o una “letrina” se puede contribuir a mantener el agua y el aire más limpios.

Para lograr esto entrenaron a 16 vacas de 5 meses de la raza Holstein a usar una letrina diseñada para enseñarles en tres pasos.

El primer paso era dejarlas hasta que orinaran en la letrina, al lograr esto se les recompensaba con una mezcla de melaza diluida o cebada y se les abría la puerta.

Después se situaban en un callejón de 2 metros junto a la letrina separados por una puerta que podían abrir para acceder. Cuando entraban y orinaban dentro recibían una recompensa, si orinaban en el callejón eran rociadas con agua durante 3 segundos como señal negativa.Reproductor de vídeo00:0000:50

Al final eran liberadas en un espacio más amplio con acceso a las letrinas y eran recompensadas cuando accedían a la letrina correctamente.

Logros del entrenamiento

El equipo logró que en 10 sesiones de entrenamiento, 11 novillas logren usar correctamente la letrina el 77% de las vecesEsto supera a un niño aprendiendo a utilizar el baño.

Lindsay Matthews dijo:“

Fue fascinante lo rápido que aprendieron. El promedio fue de 20 acciones de principio a fin. Fue increíble.”

La orina en las granjas genera más problemas al ser liberada en su entorno, pezuñas dañadas y enfermedades respiratorias son unas de estas. El óxido nitroso que es liberado de la orina es 300 veces más fuerte que el dióxido de carbono y 10 veces más fuerte que el metano.

La investigadora Lindsay Matthews espera que el sistema de entrenamiento para que las vacas vayan a las letrinas pueda ser adoptado por todo el mundo.  

“Si pudiéramos encontrar una manera rentable de hacerlo, podríamos tener un pastizal con inodoros móviles”